Así nos recibía Jose Luis después de un día increíble rodando con nuestras Ducatis por los Pirineos y comenzaba la experiencia en este increíble lugar situado en pleno valle de Benasque.
Esta entrada en el blog tiene el objetivo únicamente de compartir mi experiencia. No soy critico, pero con mis palabras, me gustaría agradecer a todo su equipo el buen trato recibido durante mi estancia como huésped de Casa Muria y animaros a preparar una escapada hasta para disfrutar de lo que allí os espera.
Hace unos cuantos años que conocía a Jose Luis y su buen gusto por las motos. En uno de sus visitas a Madrid, nos dio a conocer su Hotel y la ilusión que tenia por enseñarnos su pequeña colección. ( ahora lo considero un museo por todo lo guardado, solo para el disfrute de los visitantes) Muchos amigos ya habían pasado a conocer Casa Muria y me hacia una idea de lo que podía encontrarme al llegar, pero nunca me hubiera podido imaginar como seria vivir la experiencia de alojarse allí durante unos días.
Llegar hasta el Valle de Benasque ya es una experiencia brutal, nuestro viaje comenzó en Madrid pero el disfrute llego desde Olite y fue constante hasta que después de 8 horas de curvas aparcamos la moto en el Hotel.
La carretera para llegar estaba poco transitada para ser finales de Agosto, con unas curvas y asfalto que incitan a no bajarse en horas de la moto. Si no has rodado nunca por el norte, te aconsejo que prepares 3/4 días y te escapes para disfrutar de un entorno único en la península.
Casa Muria es una casa rural es del siglo XVIII y esta ubicada en una pequeña aldea en plena montaña, con una posición única para disfrutar del paisaje que nos regala el pirineo Aragones. Reformada completamente por Jennifer y Jose Luis como ellos consideraban debía ser una casa de la montaña, pero sin perder ningún detalle que pueda ofrecer un hotel de 5 estrellas.
En cada rincón de su casa te encuentras detalles únicos, todos tienen un sentido y os aseguro que merece la pena conocer los motivos por los que decidieron decorarla con tanto estilo y elegancia.
Un detalle que me sorprendió y al que dedique unos minutos fue el libro de visitas. Son muchos los huéspedes que por allí han pasado y siempre es curioso leer las miles de historias diferentes, todas escritas con mucho cariño.
Pero volviendo al principio, casa Muria es mas que un hotel y un articulo que leí hace unos años lo explicaba perfectamente.
¡El hotel donde duermen las Ducati!
En una pequeña estancia apartada de la casa principal te encuentras una puerta de madera que bien podría ser otra habitación, pero ha sido el lugar escogido para compartir muchos recuerdos de la historia de Ducati en nuestro pais.
Aparte de la colección de joyas que tiene allí expuestas, que por cierto todas están con su mantenedor de baterías y listas para rodar.. Jose Luis tiene guardados muchos recuerdos que a un friki Ducatista como yo, me hacen viajar a muchos recuerdos de mis comienzos en este mundillo. En la siguiente foto se puede apreciar el buen gusto de nuestro anfitrión. Siete Ducatis, cinco de ellas son unidades exclusivas, transformadas por Radical Ducati, que posan junto a una Mh900 y una Sport classic 1000 monoposto.
Y como el objetivo de este texto, es el de animar a que todos los Ducatistas conozcan Casa Muria, no voy a entrar en detalles, si quieres saber más, lo mejor es ir a su casa y disfrutar de toda la experiencia.